Branson, de 62 años, se disfrazará con un uniforme femenino y servirá a los pasajeros de un vuelo entre Kuala Lumpur y Londres dos años después de perder una apuesta sobre la Fórmula 1, anunció el consejero delegado de AirASia y amigo de Branson, Toni Fernandes.
"Ahora aquí vemos a un hombre con honor a Richard Branson que me acaba de contactar para saldar su apuesta. Será azafata de AirAsia en mayo. Dos años tarde, pero lo importante es que no se ha olvidado", escribió el empresario malasio en Twitter.
La aerolínea tendrá que confeccionar un vestido rojo, con falda por encima de la rodilla, a medida de los 1,80 metros de Branson, uno de los hombres más ricos del planeta y dueño de la aerolínea Virgin, entre las 400 empresas de su conglomerado.
En diciembre de 2009, el fundador de Virgin desafió al equipo Lotus F1 de Fernandes frente a su escudería Virgin Racing a ver cuál quedaba en un puesto más elevado en el campeonato de Fórmula 1.
Branson perdió la apuesta, pero tuvo que posponer la obligación contraída tras sufrir una lesión en la rodilla en 2011.
Toda la recaudación de ese vuelo irá destinada a una organización humanitaria elegida por el millonario británico, que con una fortuna de 4.200 millones de dólares controla un imperio con ramificaciones en el sector discográfico, editorial, de telecomunicaciones y hasta la primera aerolínea espacial comercial del mundo.
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